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El debate público

Trump, hechos, dichos y salarios

Ricardo Becerra

La Crónica 

13/11/2016

 

Me duele admitirlo, pero de entre el cúmulo de amenazas y sandeces, el Señor Trump tiene un punto que va a ser usado en nuestra contra: los salarios en las naciones que compiten con EU son demasiado bajos. Artificialmente. Y por desgracia, tiene razón.

En su “Contrato con el votante americano” para sus primeros 100 días de gobierno reitera: “Hay países que juegan sucio… usando los salarios bajos”. https://www.donaldjtrump.com/contract/

Durante el primer debate entre Hillary y Donald, el energúmeno dijo: “Los empleos de los ciudadanos estadounidenses se están yendo hacia México y China…Tenemos que detener el robo de nuestros empleos y empresas… Si se quieren ir a México, a pagar migajas, les deseamos buena suerte, pero si quieren regresar a nuestro país y vender sus productos sin pagar impuestos, se equivocan”. http://www.excelsior.com.mx/global/2016/09/26/1119141

En otra entrevista deliberadamente confusa (12-XI-2015) Trump dice impulsar el aumento del salario mínimo: estoy diciendo que sí vamos a competir con otros países, no podemos ganar porque nuestros salarios son demasiado altos, porque allá hay un dumping social. Digo que se incremente el mínimo a 15 dólares www.washingtonpost.com/news/fact-checker/wp/2016/08/03/a-guide-to-all-of-donald-trumps-flip-flops-on-the-minimum-wage/.

Pregunta: “¿Qué piensa sobre el salario mínimo y el movimiento de lucha por $15 dólares por hora?”: Trump: “… somos un país no competitivo… Mira, los salarios efectivamente no han subido en cerca de 20 años, pero vamos a traer tanta competencia y tantos trabajos de vuelta, que la gente va a hacer una vida mucho mejor, con salario mínimo. http://www.latimes.com/nation/politics/trailguide/la-na-trailguide-updates-wage-stagnation-which-has-helped-drive-1473019716-htmlstory.html

Por su parte, el asesor político de Trump, Stephen Miller, le dice al Washington Examiner que estarían dispuestos “a usar el salario mínimo como un factor de negociación en el comercio y la política de inmigración”. https://www.washingtonpost.com/news/fact-checker/wp/2016/08/03/a-guide-to-all-of-donald-trumps-flip-flops-on-the-minimum-wage/.

Y en la malhadada conferencia de prensa, en Los Pinos, dijo con toda malicia: “Los trabajadores en ambos países necesitan aumentos salariales desesperadamente En EU los salarios han caído durante los últimos 18 años… y México vive lo mismo y no puede ignorar tal situación”.

No se necesita ser demasiado sagaz para entender que ése es un tema inevitable.

En cinco estados de EU, en la misma elección de Trump, el salario mínimo fue línea para referéndum: en Arizona se aumenta el mínimo de 8 dólares a 10 el próximo año, y después sigue subiendo de forma incremental. En Colorado el salario mínimo pasa de 8.31 dólares la hora a 9.30 con incrementos concertados a 90 centavos cada año hasta llegar a 12 dólares la hora en 2020. En Maine se vota aumentar de forma gradual el mínimo de 7.5 a 12 dólares para 2020.

Washington vita un aumento gradual del salario mínimo de 9.47 dólares la hora, a 13.5 para el año 2020, además de que los empleadores tendrían que ofrecer días de enfermedad con pago (ver http://www.nytimes.com/elections/results/).

Y además, en Dakota del Sur se sometió a votación en sentido contrario: referendo para reducir el salario mínimo para los jóvenes menores de 18 años. Pero los 66 condados del Estado votaron por NO reducirlo con un apabullante 71% de los votos.

Antes de que Trump asuma legalmente la presidencia de los Estados Unidos, nuestro país debería acordar una política nacional, racional, gradual y firme, de incremento a los salarios de los trabajadores, empezando por los mínimos.

Me duele que un fascista nos lo eche en cara, pero nuestros salarios (mínimos) no solo son injustos, no solo no permiten salir de la pobreza extrema, no sólo entorpecen la expansión del mercado interno, sino que se van a convertir en un factor POLÍTICO de negociación con el nuevo maniático inquilino de la Casa Blanca.

Soberanamente: hay que quitarle esa ficha de chantaje y negociación, antes de que acabe el 2016.